MUCOSIDAD EN LOS MÁS PEQUEÑOS DE LA CASA
Últimamente estoy observando que cada día hay más niños, menores de cinco años, con problemas de mucosidad.
Hay una obsesión excesiva por parte de los pediatras a aconsejar a las mamás que den a sus hijos proteína animal (cordero, pollo, ternera, huevos) desde edad muy temprana, cuando sus órganos inmaduros, todavía no están desarrollados para digestiones tan laboriosas. Aquí comienza el problema de la mucosidad.
Siendo los mocos un sitio idóneo para la aparición de virus e infecciones de todo tipo, desde gripes o resfriados comunes hasta la conocida cándidas u hongos.
Además de la proteína animal (no le vamos a echar toda la culpa a ella) hay ciertos alimentos que son propensos a crear mucosidades: harinas, panes, bollería, trigo, avena, arroz blanco cocido, dulcificantes concentrados, salsas que contengan vinagre, vinagre, miel, frutas, zumos, azúcar, quesos y por supuesto la leche de vaca, leche de soja, o de avena, siendo la de vaca y la de avena las que más mucosidades crean y productos fermentados.
Si eliminamos estos alimentos y añadimos kuzu veremos cómo el instestino de nuestro pequeño se recupera y las mucosidades desaparecerán.
No queramos ir deprisa con nuestros hijos, todo a su momento y en cantidades equilibradas para no saturarlos y crear conflictos en su minúsculo y delicado cuerpo.
Por tanto, preocupémonos por darles lo mejor, dándoles amor, cariño y una nutritición acorde a su edad.